Amazonia, por Doris Naffah

Próximas presentaciones

6 de septiembre (jueves) a las 6:30 pm en el Instituto de Cultura Peruana, Miami, EEUU. Auditorio del NPTI, 4000 West Flagler St. Miami, FL 33134 

7 de septiembre (viernes) a las 12:00 pm en la Peña "Rosell", Big Five Club, 900 SW 92 Ave. Miami FL.

7 de septiembre (viernes) a las 8:00 pm en el Viernes Cultural, Sede de los Municipios de Cuba en el Exilio, 4600 NW 7 Str. Miami, FL.

8 de septiembre (sábado) a las 3:00 pm en El Arepazo 2 Weston, 4446 Weston Rd. Davie, FL 33331 (954) 617-6422

9 de septiembre (domingo) a las 3:00 pm en El Arepazo 2 Doral, 3900 NW 79th Ave. Doral, FL 33166 (786) 464-1230 

Palabras de la Autora

Deja que te cuente...
Estos son mis cuentos; aquellos que quisiera contarles durante una charla mientras disfrutamos de un café... o de una copa de vino. Yara y otras historias es una colección de treinta y cuatro relatos en los que he desahogado mi alma buscando mis raíces, encontrando mi naturaleza femenina, enfrentando miedos ancestrales, descubriendo la esencia de la condición humana, viviendo y desviviendo emociones y sentimientos diametralmente opuestos, soñando despierta, volando a otros mundos, a otros tiempos, a otras realidades más o menos mágicas… más o menos reales. Yara y otras historias es una ventana abierta a una parte de mí que pocos conocen y que he decidido compartir.
Patricia Schaefer Röder
©2010 PSR

Camila

...Nosotras sólo hacemo’ magia buena —dijo la vieja, señalando una pared cubierta de velones votivos de todos los colores—. Tengo el agua corriendo pa’ que se lleve la mala energía, las cosas malas.
—¿Y en esas botellas qué hay?
—Esencias pa’ la suerte, pal’ amor, pa’ la salú’, pal’ dinero y pal’ trabajo. Lo de siempre, pue’. To’ el mundo busca lo mismo...

Selva

La línea de su gran hocico termina en una especie de sonrisa perenne. Pareciera alegrarse de verme, tanto como yo me alegro de haberme topado con ellos. Se mueve en el agua sin ninguna dificultad, buscando más hojas para calmar el hambre que deja la maternidad. Ahora entiendo por qué los antiguos marineros los confundían con mujeres...

2045

Volteé la cabeza en dirección a la puerta, y vi venir a un hombre corpulento de unos sesenta años que compartía las facciones de la anciana. Parecía no entender qué hacía yo allí, sentado frente al televisor con un rosario en la mano. Me preguntó quién era y por qué había entrado en su casa.

Bendición

Así hizo, noche tras noche, año tras año, durante toda una eternidad, sin percatarse de que en algún momento, los niños habían crecido y se habían ido de la casa. Y aún ahora, cada noche, la madre repite aquella solemne y amorosa ceremonia de bendición a sus hijos...

Fue bueno

... nadie la amarraría más. Se habían roto las cadenas. De ahora en adelante viviría su vida como ella quisiera. Ella por siempre y para siempre. Siempre queriendo lo bueno. Siempre lo bueno. Lo bueno. Fue bueno que sucediera aquello que todos supieron pero que callaron forzosamente.

Perversión

...pero poderosos políticos presionaron para promover problemas perennes, poniendo puntos por pruebas, palizas por premios, pánico por protección, pecados por paraíso, pérdidas por pertenencias, persecuciones por paciencia, piedras por prados, pistolas por pan, prostitución por pudor, polución por pureza, pobreza por perdón...

Amanece

Pareciera que al sol le costara cada vez más trabajo imponerse sobre la noche. Amanece en el quinto. No en el cuarto, ni en el sexto. Amanece en el quinto piso del parque de oficinas que desde las lomas del sur vigila a la ciudad en su valle.

Yara

...mi emoción crecía como la maleza en el monte; fuerte, tupida, invadiendo todos los resquicios de mi alma. Di mil vueltas por la ciudad y finalmente encontré al hombre. Vivía en una pequeña casa amarilla con techo de tejas rojas y un porche amplio desde donde se podían ver las montañas...